Cuando estuve en Inglaterra estudiando inglés con 17 años no entendía la devoción de los ingleses por los sándwiches que, para mí, eran pan con algo dentro. Sin más. En el caso de los sándwiches que me daba la familia con quien me tocó alojarme, nunca supe qué era exactamente ese algo, excepto cuando era mantequilla y pepino (años me costó quitarme la ojeriza que le cogí a la hortaliza en cuestión).
Con los años he ido descubriendo que un sándwich puede ser mucho más que pan con algo aunque, a pesar de mi buena mano en la cocina, yo preparo los peores sándwiches de la galaxia. Y si son calientes, además, los quemo.
Pero hablemos de diseño (sin dejar de hablar de sándwiches).
Jon Chonko en 2011 comenzó su proyecto de escaneo de sándwiches de una forma fortuita, lo llevó a un tumblr y terminó convertido en un libro (que se puede previsualizar en este enlace) y algo de merchandising. Escanear un sándwich no es tarea fácil, sobre todo los calientes (lo cuenta en esta entrevista) o los que gotean, pero el resultado es espectacular :
Otro libro de sándwiches, en este caso, en sentido literal, es «The sandwich book«, un proyecto de Pawel Piotrowski en el que pretendía reproducir en papel las especiales características de un sándwich: el tamaño, las texturas, cada página distinta…
El estudio australiano Design Kids organiza la exposición «Terrible Two» donde empareja a un diseñador consolidado y un estudio emergente para que hagan un trabajo conjunto. En este caso, se trataba de crear una pieza compuesta por dos patas a partir de una palabra formada por dos palabras que juntas significan algo diferente a cada una de las dos palabras por separado. La propuesta de Maud es este sándwich en suspensión:
A la hora de presentar ingredientes para una receta, parece que el cook book de IKEA del que ya hablé en su momento (sí, ese objeto de deseo que no hay forma de encontrar por ningún sitio) generó una corriente que han seguido diseñadores y diseñadoras como Carolin Wanitzek. En esta instalación para Food Throttle la receta del sándwich queda así:
Rachel Ryle, diseñadora gráfica con preciosos vídeos en stop motion en Instagram, nos prepara un sándwich (bueno, una tostada que podría ser un sándwich) con cara de Goofy:
Y para cerrar, el estudio PES Films -los del laureado corto Guacamole– nos deleitan con otro corto. Sí. Es un sándwich.